Un cambio de paradigmas
Desde hace algunos años se han venido incorporando otras formas de publicitar a través de nuevos medios de comunicación buscando adaptarse a los constantes avances tecnológicos.
Desde sus comienzos, la publicidad se ha creado con el fin de convencer e informar al público para que actúen o reaccionen de una determinada forma. A través de los medios convencionales como lo son la televisión, la radio, el diario o la vía pública, se vieron infinidad de publicidades y propagandas que lograron o no cumplir con sus respectivos objetivos. Sin embargo el mundo de las comunicaciones evolucionó, se agilizó y en gran medida debido a la incorporación de una nueva herramienta: internet.
Según una nota de Ivana Nazareno basada en un estudio de mercado realizado por la consultora PwC “se está logrando cambiar un paradigma de publicidad centrada tanto en medios de comunicación convencionales como los gráficos, televisivos o radiofónicos para hacer especial hincapié en la red, donde 7 de cada 10 usuarios permanecen conectados durante varias horas al día, utilizando las diversas plataformas digitales y sus respectivas formas de interacción.”.
Internet poco a poco se ha venido instalando como el canal o medio publicitario de mayor valor, del que se puede obtener los mejores beneficios, y del que toda empresa quiere formar parte, ya que su alcance es mayor al de cualquier otro medio de comunicación, alcance tanto comunicativo como participativo. Esta ventaja que otorga, genera al mismo tiempo que las vías tradicionales de
comunicación, si bien se siguen utilizando, queden absolutamente en un segundo plano como medios secundarios o complementarios, utilizados para reforzar el mensaje transmitido por las redes y no como vías para mensajes principales como solían ser utilizados hace algunos años antes de la aparición de internet.
Hoy en día, hay más de una red social por la cual se puede publicitar un producto o un servicio. Igualmente, así como en la mayoría de los casos el alcance que tiene cada una de ellas es de gran ayuda para el crecimiento de la marca, producto, etcétera, siempre se corre el riesgo que la respuesta por parte de los consumidores sea negativa, por lo que en ese caso el alcance de las redes perjudicarían a la imagen de una empresa. Por lo que si bien esta nueva forma de publicitar genera grandes beneficios, las empresas tienen que ser muy cuidadosas y no perder de vista las desventajas que las mismas podrían traer si no son utilizadas correctamente.
Zuckerberg Martina